Santiago Segura recuerda a Berlanga

Santiago Segura es una de las mentes más grandes, divertidas y geniales del panorama español, es actor, guionista, productor, director y todo lo que se proponga. Su papel como José María en "El Día de la Bestia" le dio cierta fama, y recibió el Goya al Mejor Actor Revelación. En 1998 estrena "Torrente, el brazo tonto de la ley", una comedia estéticamente genial que se ha ido convirtiendo en un fenómeno nacional, el personaje protagonista, interpretado por el propio Segura, es José Luis Torrente, un policía corrupto que trabaja fuera de la ley bajo la idolatría de jóvenes que aspiran a llegar a ser policías. La fe de Torrente en el Fary y el Atlético de Madrid es la barra de metal que sostiene a este personaje, además de sus aspectos habituales rodeados de flatulencias y sexo en puticlubs. Ha trabajado con los mejores directores españoles y algunos internacionales, su figura humorística ha arrancado una sonrisa a todos los que han disfrutado de un monólogo del actor. Hoy día estamos a la espera del estreno de "Torrente 5", que contará con Alec Baldwin en el papel de villano como se ha anunciado a la prensa. Santiago Segura hizo un pequeño caneo en "Todos a la cárcel" de Luis García Berlanga, después Segura estalló como una bomba de relojería. El propio Santiago ha declarado que las dos personas más grandes del cine español eran Tony Leblanc y Berlanga, hoy desaparecidos ambos, tuvo la suerte de trabajar con sus dos ídolos, a Leblanc le hizo ganar el Goya al Mejor Actor de Reparto.

Hoy Santiago Segura se acerca a Mondo Berlanga para recordar a Luis García Berlanga.

Santiago Segura sobre Luis Gª Berlanga:

Sobre Luis escribiría no un párrafo sino varios, ya que era, es y será mi ídolo cinematográfico absoluto. Injustamente desconocido en el extranjero, y quizás no suficientemente valorado en España, siempre he defendido que su obra debería ser parte del plan de estudios, al igual que lo son las grandes novelas.
El dia que vi en la Filmoteca “El Verdugo” fue cuando pensé que me gustaría hacer algo así; algo terrible, oscuro y desagradable de lo que además pudieses reírte.

Cuando conocí a Luis en un cursillo de “Proyecto y Piamonte” descubro a la persona detrás del director, un tipo cercano y simpático con el que compartía aficiones y que desde aquel momento se convirtió en una especie de amigo-padrino con el que pude compartir algunos grandes momentos y que incluso me dio la oportunidad de trabajar con el en sus dos últimos largometrajes, “Todos a la cárcel” y "Paris Tombuctu” y en su despedida definitiva del cine, el cortometraje “El sueño de la maestra”.