domingo, 21 de enero de 2018

Tras la pista de los Coen

A estas alturas los hermanos Coen se han convertido en un emblema cinematográfico, un estilo narrativo, un adjetivo, un sentido del humor, una época, un color, un sonido, prácticamente un género. Mientras Ethan y Joel Coen se aventuran en nuevos proyectos y se siguen descubriendo así mismos, el mejor cine-Coen se desarrolla en paralelo. La excelente serie "Fargo" (creada por Noah Hawley en 2014) a partir del universo de los hermanos de Minnesota se ha convertido en la máxima representación de este género de la América profunda. Pero la carrera de los Oscar ha comenzado y en ella se posicionan dos grandes películas con el sello Coen, una de ellas con truco pues "Suburbicon" (George Clooney, 2017) está escrita por ellos, aunque reside en Clooney la enorme capacidad de captar su estilo narrativo y en perfecto entendimiento en lo que refiere al humor. A base de humanidad, sobriedad y rutina, ha logrado edificar una exquisita comedia negra donde encontramos a Matt Damon como ese estadounidense medio, ese hombre gris, vicepresidente de alguna mediana empresa, ese ciudadano que si cometiese algún crimen sería respaldado por un ejército de vecinos a grito de: "Siempre fue una persona muy buena, un vecino ejemplar". La otra, "Tres anuncios en las afueras" (Martin McDonagh, 2017), está protagonizada por Frances McDormand, esposa de Joel Coen y eterna agente Marge Gunderson en "Fargo" (Joel & Ethan Coen, 1996), y se ha convertido en la gran revelación de la temporada al alzarse con los premios de Mejor Película Dramática, Mejor Guión, Mejor Actriz y Mejor Actor de Reparto en unos Globos de Oro que vistieron de luto reivindicando el #MeToo, donde este film sobre una madre que debe aceptar que no encontrarán al violador y asesino de su hija se ha convertido en una bandera.

Matt Damon desestresándose en "Suburbicon"


"Suburbicon" es mucho mejor película, sin duda más cinematográfica, estética y plástica, parte de unos personajes exquisitos, riquísimos en matices, desde esa excelente Julianne Moore con doble papel, hasta ese inteligente agente de seguros. Un Óscar Isaac laberíntico, que juega con astucia con el espectador, perdiéndolo en diálogos infinitos escritos con la mejor pluma, herederos de la comedia clásica estadounidense. Con los Coen en estado de gracia y un Clooney resolutivo en la dirección obtenemos una película —hereda también del gran Hitchcock dando un vuelta a su concepto del "falso culpable"— que sería impecable si no fuera por esa subtrama con los vecinos negros que nos saca sin motivo de la trama principal. El punto de crítica antiracista que le hubiese abierto paso en los premios, si no fuese porque este era el año de las féminas: "Time's Up!". El film de McDonagh llega en un momento clave, retrata sin ningún pudor esa América interior de crímenes sin resolver, policías alcohólicos y buenas personas que no encuentran el momento para convertirse en el héroe que el pueblo necesita. "Tres anuncios en las afueras" es un guión que trabaja puntual a los puntos de giros de Syd Field (sí, esto de estudiar la estructura cinematográfica nos hace estas faenas), personajes que evolucionan con coherencia y un leitmotiv excelente, esos carteles que vienen y van durante la obra marcando los actos. McDormand está estupenda como esa desenfrenada madre desesperada, sin embargo el film se distancia con el estilo Coen en un punto crucial, el humor. Probablemente se quisiese narrar la historia sin él, pero ese no es el problema, tiene un enano y un policía que vive con su madre que nos regalan pequeñas dosis. Lo que chirrían son las porciones de emotividad, acompañadas de una música petarda y maniquea que nos lleva directamente a la lágrima, sin dejar opción. Es sin duda alguna el Oscar a la Mejor Actriz de este año.

McDormand y Peter Dinklage, cena romántica

1 comentario:

  1. Rockwell está impresionante en Tres anuncios en las afueras. Óscar al mejor secundario? No me parece secundario, pero en fin...

    ResponderEliminar